Frío y humedad
La diferencia de temperaturas y la humedad en
el interior del vehículo provocan que los cristales se
empañen. Al activar el climatizador o el aire acondi-
cionado del vehículo, dirigiendo las toberas hacia las
lunas, el aire seco choca contra los cristales y evita
la condensación de agua sobre los mismos. Puede
parecer una contradicción encender el aire acondi-
cionado en invierno, pero no olvide que puede
seleccionar la temperatura del mismo, y que su efecto
será el mismo que el de la calefacción.
Por otra parte, el frío y la humedad propios de
los meses de invierno originan una reducción en el
agarre de los neumáticos al firme, pues el óptimo
funcionamiento de éstos suele darse a temperaturas
superiores a las propias de estos meses. Reducir la
velocidad y aumentar la distancia de seguridad con
los vehículos que nos preceden son las mejores
soluciones para evitar vernos envueltos en situacio-
nes de extrema peligrosidad. La reducción de
velocidad y el incremento de la distancia de seguri-
dad son acciones que debemos maximizar cuando
aparece la lluvia, la nieve, el hielo o la niebla.
48
www.centro-zaragoza.com
Nº 50 - Octubre / Diciembre 2011
Reducir la velocidad y aumentar la distancia
de seguridad son las acciones básicas que, trenza-
das con una atención extrema por parte del
conductor, contribuyen a evitar un buen número
de situaciones de riesgo que se derivan de la
conducción en los meses de invierno.