Página 30 - Fundación Comforp, mundo recambio y taller revista 351

351 · octubre 2012 30
A NUESTROS OJOS
Sabemos lo que es un primer día de una edición ferial; lo que pasa es que en Automechanika Frankfurt, incluso los
primeros días son otra cosa.
Pero esta vez, y para nuestra sorpresa, (y llevamos 15 ediciones), el primer día, en un ambiente de bochorno previo
a las tormentas que se sucedieron por la tarde, parecía cualquier otra feria que no fuera el buque insignia de Messe
Frankfurt: pocos visitantes para lo que es el estandarte de la marca establecida ya en 12 países incluido el nuestro,
lo que nos extrañaba tanto que no la reconocíamos.
Afortunadamente, el segundo día Automechanika volvió en sí, y los pasillos, escaleras, via móbile, shuttles que co-
nectan los pabellones (¡¡¡la magnitud del recinto lo necesita!!!), entradas a los distintos ‘Hall’ se hallaban llenos de
bullicio; muchos encuentros en los pasillos con profesionales españoles sin stand (toda la distribución desfiló), y
por supuesto, encuentros con los profesionales españoles con stand.
El programa de presentaciones de prensa así como el de las animaciones, formaciones, informaciones, etc. activa-
ba las arterias del recinto y el devenir de caras conocidas se iba acrecentando a medida en que pasaban las horas.
Presentaciones de producto, estrategias de compañía, nuevos cargos, nuevas iniciativas se daban a conocer en los
diferentes stands de los pabellones y las zonas exteriores, (unas zonas otrora repletas y en esta ocasión con algu-
nos claros, como en determinados pabellones).
El tercer día, siguió la tónica. Desde luego se puede hablar de una feria internacional, pese a que la logística de los
visitantes haya cambiado. Éstos realizan estancias más cortas (cosa que también han reorganizado los diversos
ejecutivos de los stands) y optimizan el tiempo al límite. Cosas de la tesorería, que hay que estudiar al límite.
Y los comentarios recibidos durante nuestra visita, bastante positivos: si bien el primer día hubo momentos de cal-
ma (demasiada, a veces), el ritmo se aceleraba de forma interesante (sin ser la locura de otros años) los días si-
guientes.
Las tres últimas jornadas, pues con tendencia al descenso, aunque al final hubo satisfacción por acudir al que, a
pesar de todo y hoy por hoy, es el referente para la posventa de Europa para sus mercados internos y para los ojos
de los distintos mercados que pretenden hacer negocio en el viejo continente.
Hubo zonas vacías, pese al récord de expositores, y vimos también muchas animaciones que, más que profesiona-
les (que también, ¡que las sesudas conferencias y las presentaciones se solaparon muchas veces!) eran de ocio.
Percibimos sobre todo, mucha profesionalidad, menos charla distendida y más networking del bueno (que se dice
ahora), para rentabilizar el tiempo de estancia.
Y también asistimos a los primeros ajustes en extensión y horario, fruto de la necesidad de optimizar recursos y
rentabilizar la visita y la presencia: menos días y más duración de la jornada, para exprimir bien el tiempo destina-
do en participar en la que, hoy por hoy, viene siendo LA feria de la posventa.
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