66
336 · Marzo 2011
Charlando
entre amigos
Tras lo humano y lo divino, algo de sector.
Una opinión compartida: las posibilidades que existen en esta posventa
española que, pese a la crisis generalizada que sufre el país, no ha sido
de los sectores más castigados. Pese a las dificultades y a la necesidad
de duplicar esfuerzos para ajustar la operativa y las estrategias de las
empresas, sigue habiendo mercado, siguen existiendo posibilidades de
crecimiento, sigue habiendo solvencia y buen hacer. Generalizado.
Los concesionarios no se vieron como un competidor, sino como un con-
currente, al que hay que observar, pero que tiene su problemática y que
aún no ha conseguido el
know how
del canal multimarca.
Como amenazas: la morosidad derivada de la crisis financiera que afecta
al conductor, con la repercusión que tiene en los talleres, lo que que pro-
duce un efecto dominó en los negocios de distribución y en sus provee-
dores, y que hay que vigilar muy de cerca. Todos están en ello. Y la cade-
na de valor funciona y trabaja con bastante armonía.
Como incertidumbres en el mercado: las nuevas empresas que ofertan
sus productos por internet como canal de aprovisionamiento ajeno al
sector de la distribución “tradicional”, pese a que casi todas las compa-
ñías que operan desde hace años en el sector emplean ya ese recurso
para ofrecer la opción a sus clientes fácil, cómoda, con valores añadidos.
La forma de hacer negocios ha cambiado con las nuevas tecnologías, y la
rapidez en la transmisión de datos es fundamental para la gestión diaria
del quehacer de los profesionales de la posventa, cada día surgen nuevas
herramientas que pueden suponer un giro en el día a día, pero sigue
siendo un canal profesional, B2B, en el que no se contempla (como en
Sudamérica) una apertura al exterior hacia el usuario.
Otra incertidumbre: la compactación de plataformas por parte de los
constructores de vehículos, que va a tener su efecto en los negocios de
distribución para posventa y va a cambiar la multiplicidad de diseño de
piezas, reduciéndose (aunque supondría facilitar la labor de almacenaje,
hay que seguir hay que estar pendiente de referencias, códigos, y sobre
todo, flujo de información rápida); no obstante, se apuntaba, los cons-
tructores siguen lanzando modelos, y la carrocería, el “vestido” va a ser
tan variada como siempre o más.
También salieron a la conversación las nuevas disposiciones de veloci-
dad y sus posibles efectos en el mercado, pero que se veían en positivo:
caravanas en las autopistas, que pueden ser hasta beneficiosas, los pre-
cios del petróleo, que hacen que el conductor se retenga de emplear el
vehículo.
La electrónica como reto, ya que, pese a ser presentada como la solución
más solvente a la seguridad, a la gestión del motor, a la fiabilidad, sigue
siendo una fuente de negocio porque las averías suelen provenir de ese
tipo de dispositivos; aunque la mecánica sigue imperando, entre fabri-
cantes, entre distribuidores las piezas clásicas de mantenimiento las de
más rotación, aunque también piezas de motor. Más se haría si las ITV
hicieran a conciencia su trabajo, se apuntaba.
Y la conversación volvía al futuro prometedor que hay en el sector, con la
premisa de prepararse de seguir adaptándose a los nuevos retos para
dar un servicio total, tener de todo para dar respuesta: multiespecializa-
ción, realizar acuerdos (no necesariamente entre grupos de distribución,
también de grupos de empresas, de servicios, buscando el valor añadi-
do).
Y se cerró la charla con las tapas, y con una alabanza a la distribución de
Galicia por parte de Antonio Rodríguez: muchos (no
pocones
, decía),
maravillosos, solventes, emprendedores y expertos.
Y es verdad.
1...,56,57,58,59,60,61,62,63,64,65 67,68,69,70,71,72,73,74,75,...76