340 · septiembre 2011
45
C
omponente mecánico por excelen-
cia y de baja rotación, la
junta de
culata
no reúne las característi-
cas para ser un producto súper-
ventas. Si a esta naturaleza como pieza de re-
cambio le unimos una situación económica
como la actual en la que muchos conductores
no están para grandes dispendios lo que, equi-
vocadamente, les está llevando a descuidar el
mantenimiento y revisión de su automóvil, da
como resultado un mercado duro en el que
cada vez cuesta más vender juntas de culata.
Las marcas que ofrecen una amplia gama y
productos de calidad, no obstante, están ca-
peando el temporal.
La dichosa crisis
El actual coyuntura económica no ayuda a la
venta de juntas de culata. Aunque no se trata de
un producto al que le afecte directamente la
crisis, sí que el repercute las reacciones ante
ella que tiene el mercado. Por ejemplo, la
dis-
tribución se muestra más reticente a
la hora de realizar pedidos
. Nos lo expli-
caba así un fabricante de referencia de juntas
de culata: “
los almacenes distribuidores, dada
Informe
y su mercado de reposición
Juntas de culata
En un clima de desconfianza, la venta de juntas de culata es una lucha diaria contra
varios elementos: la distribución compra con el freno de mano echado ante la
situación de incertidumbre, la falta de dinero de los conductores que a muchos
impide afrontar grandes reparaciones en el taller o una reducción de sustituciones
a causa de la mayor calidad del producto. A pesar de ello, sigue en la brecha.
la época de incertidumbre que atravesamos, en
su mayoría frenan las compras para capitalizar
sus stocks y compran mucho al día
”.
Javier Matesanz
, director de ventas de
Dana Automoción, S.A.-Glaser
, en una entre-
vista que publicamos hace pocos meses (pági-
nas 20 y 21 de MRyT número 336 de abril de
2011), también se refería al actual contexto
económico: “
los clientes nos transmiten una
percepción de riesgo, por los impagados. Se si-
gue reparando pero hay mucha morosidad y la
percepción es que esto va a incrementarse. Si
las ventas de un producto caen un dos o un tres
por ciento, es asumible: no todos los años van a
ser de crecimiento, hay que ajustarse y, por
suerte, ha sido un sector financieramente sol-
vente y los distribuidores han tenido capacidad
y ganas de invertir en sus negocios; el problema
es que está durando mucho en medio de un
complicado contexto internacional y con falta
de liquidez, no se mueve dinero
”.
Conclusión, se siguen vendiendo juntas pero en
menor volumen, es decir, no se ha producido
una caída muy importante en las ventas pero,
como el mismo fabricante subrayaba,
las
ventas están estancadas
.
El hecho de que muchas familias lo estén pa-
sando mal para llegar a fin de mes también tie-
ne su influencia.
El coche y su revisión
deja de ser una cuestión prioritaria
con
todo lo que conlleva. No acude al taller por lo
que éste no le puede recomendar el cambio de
junta porque la que monta está ya muy castiga-
da. Ello puede derivar en una avería grave y
mucho más cara que, obviamente, el conductor
no podrá pagar.
Pero no todo son malas noticias para los que
operan en este mercado. El paulatino envejeci-
miento del parque automovilístico, que se acen-
tuará en los próximos años está comportando
un aumento de vehículos con mayor kilometraje
susceptibles de que se les tenga que cambiar la
junta de culata. En otras palabras,
está au-
mentando y aumentará aún más el
número de clientes potenciales de
esta pieza
. En este sentido, los proveedores
están a la expectativa.
Hegemonía
multimarca pero…
El
principal demandante de juntas de
culata
en el
mercado posventa
español
sigue siendo el
taller multimarca inde-
pendiente
. No obstante, ante la caída prolon-
Juntas multiláminas Ajusa. La oferta del fabri-
cante albaceteño supera las 100.000 referencias.
Mahle Aftermarket distribuye la gama pos-
venta de juntas de culata Elring.